viernes, 20 de marzo de 2015

LA NECESIDAD DE GANAR, LA NECESIDAD DE UNIRNOS

La historia es nuestra y la hacen los pueblos, pero ¿Qué sucede cuando el pueblo olvida su historia? En 1814, con la vuelta del destierro de Fernando VII, el grito de los españoles que tiraron de la carroza del monarca cuando se desengancharon los caballos de su carroza fue “¡Que vivan las cadenas!” Muera la libertad y vivan las cadenas, con esto finalizaba la constitución de Cádiz y cualquier intento de salir del oscuro absolutismo. “La Pepa” que había sido proclamada en 1812 sólo duró dos años y jamás llego a implantarse en nuestro país. Unos años más tarde, el 11 de febrero de 1873, Emilio Castelar pronunciaba este discurso en el parlamento.

Asamblea multitudinaria del 15M
En nuestro país no ha existido nunca posibilidad real alguna de cambiar la estructura de poder. Más allá de alguna ilusión de gobierno presumiblemente de izquierdas, la oligarquía ha campado a sus anchas. Fue el 15 de mayo de 2011 cuando esas estructuras tuvieron un pequeño temblor y se vieron sacudidas por una juventud que decía basta, que no quería soportar esta situación nunca más. En realidad, muchos de nosotros no sabíamos que era lo que no queríamos, ni siquiera habíamos tenido preocupaciones políticas reales que no fueran estar ligeramente a la izquierda de la derecha, pero siempre dentro de los límites establecidos del sistema actual. Este temblor cesó en el momento en que los primeros toldos empezaron a surgir en la puerta del Sol y en el momento que las acciones y demostraciones de poder fueron realizar gritos mudos que no llevaron más que a la victoria arrolladora de la derecha más reaccionaria una semana después y que dejó los ayuntamientos y autonomías en manos de gobiernos del Partido Popular.“Señores, con Fernando VII murió la monarquía tradicional; con la fuga de Isabel II, la monarquía parlamentaria; con la renuncia de don Amadeo de Saboya, la monarquía democrática; nadie ha acabado con ella, ha muerto por sí misma; nadie trae la República, la traen todas las circunstancias, la trae una conjuración de la sociedad, de la naturaleza y de la Historia. Señores, saludémosla como el sol que se levanta por su propia fuerza en el cielo de nuestra Patria.”
Cuatro años después de estos hechos y con una juventud cada vez más formada políticamente, con más ganas de luchar desde todos los frentes contra las estructuras de poder, con los conceptos más claros de por dónde debe ir esta lucha es el momento de dar un paso adelante, es el momento de reivindicar desde lo local lo que nos corresponde. Somos nosotros, con la ayuda de nuestros mayores, los que debemos estar al frente de esos procesos de cambio y reivindicar la unidad de todos los agentes capaces de llevarlo a cabo. No podemos olvidar que fueron unas elecciones municipales en 1931 las que provocaron la marcha de Alfonso XIII y la proclamación de la II República española.
Sabemos que este proceso no es fácil, que los egos existentes dentro de las estructuras de los partidos no ayudan a este proceso, pero tenemos la necesidad de reconocer a cada paso, en todas partes y también dentro de nuestras filas, a los charlatanes, a los que repiten frases pomposas y vacías. Debemos dedicarnos a trabajar, a ser ejemplo con nuestro trabajo y nuestro discurso para cualquier persona que se acerque a colaborar en esta lucha. No podemos dejar que los artífices del cambio sean esos charlatanes, porque si no caemos en el peligro de desviar el cambio en la primera rotonda que nos encontremos, y el desvío es posible que sea hacia la derecha.
Debemos ser valientes, cada uno desde su posición de responsabilidad actual y exigir esas responsabilidades. Desde aquí y con toda humildad, sin pertenecer a su partido tengo que pedir al compañero Alberto Garzón que de un puñetazo en la mesa y evite que se sigan produciendo situaciones como la de IU Madrid, que además tiene el peligro de repetirse en otras comunidades. También es justo exigir a todos los revolucionarios de este país que salgan de su cueva, que salgan de su comodidad teórica y se acerquen a la realidad de la situación de este país, donde la población no sólo vive engañada por un mundo feliz donde Gran Hermano VIP y el futbol son los que marcan su agenda, sino que además ¿Qué nos va a diferenciar, si nos mantenemos dentro de nuestra pureza y no salimos a la calle, de los discursos vacíos sobre castas y caspas tan de moda en nuestros días?
Se llamen Ganemos, se llamen Ahora, se llamen En Común o como quieran llamarse debemos estar allí, debemos ser sujetos activos de la conquista de nuestros pueblos por medio de los ayuntamientos, debemos estar allí y concienciar a los que están llegando nuevos. Gente joven con muchas ganas, vírgenes en la actividad política, esponjas capaces de absorber todo lo que reciben. De nada sirve quedarnos en casa y nuestros círculos de confianza con la razón y las cosas muy claras de lo que habría que hacer. Si no nos manchamos las manos, sino somos capaces de volver a discutir lo que ya tenemos más que aprendido podemos llegar a ver como en unos años nos encontramos a la sociedad española pidiendo de nuevo que vuelvan las cadenas y podemos ver una nueva ilusión en el gobierno que haga que todo cambie para que todo siga igual.

Ángel Carrasco Fernández. Militante de la Asociación Democracia Real Ya

*Ángel Carrasco Fernández es militante de la Asociación Democracia Real Ya, y recién elegido en primarias número 2 de la lista que representará a Ganemos Torrijos para las elecciones municipales del 24 de mayo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

DEJA AQUÍ TU OPINIÓN

SUMAR, EL ENÉSIMO DISPARO DE FOGUEO CONTRA EL RÉGIMEN DEL 78

Tras la muerte de Franco, ninguno de los movimientos de izquierdas impulsados desde el PCE ha puesto en riesgo el sistema, es más, ni siquie...